Incorregible


A pepi

Alguna vez estuve enamorado, fue hace mucho tiempo y las cosas son fáciles de olvidar.

La primera vez que te vi andaba vestido con unos jeans rotos y tu viste mi cara mas sonriente, la de mis boxers. "Pensé que al llegar a este sitio me saludarían de otra forma pero esta es la mas partícular" fue lo que me dijiste. Nunca pensé que desde allí te amaría querida D., venías a la mente cada vez que me acercaba a la ropa sucia, cuando mis boxers no podían apestar más, tu y yo apestábamos, por eso te recuerdo, tratábamos que el mundo oliera a naftalina y no se acercaran las polillas, ambos teníamos corazón de madera, nos incendiamos una vez y la madera no se volvió a hacer, coño, prefería que nos comieran las polillas, así hubiera durado más.

Todo a partir de allí, fue más rápido.


Quedan cicatrices imborrables, en serio, una en el codo y una en la frente. Todavía me acuerdo cuando dormía en tus piernas, luego cuando no despertaba me hacías una llave maestra, no desperté y te dio tanto miedo que llamaste al 911, ellos llegaron y cuando me vieron tu te pusiste roja de la pena, "este muchacho está borracho" dijeron, las botellas bordeaban siempre nuestro nidito de amor, al día siguiente amanecí todo morado ¿con qué demonios me pegaste? No volviste sino hasta el segundo día, cuando desperté.

De acuerdo D. no fui el mas acertado de los yernos, cuando comimos fue un completo desastre, es que, estaba tan nervioso, así que tuve que embriagarme antes de llegar, tu gato y la puerta de tu garaje lo saben muy bien, no fue mi culpa, tu me decías que tu padre era una persona muy estricta, asi que me fui formal, lo más posible, culpa al dueño del bar, le dije que quería calmar los nervios, el me dio a elegir un licor que olía muy fuerte que llaman el espantasuegros u ocho cervezas, elegí las doce cervezas. Bailé con tu mamá un bolerito, con tu hermana un pasadoble, me comporté. Me llevé por el medio, varias cosas, pero bailé muy bien, tu me lo dijiste "la familia no sabe lo que le conviene a la felicidad de uno"; bueno, bailando se es feliz, borracho se es feliz, que va a saber tu familia que es lo que te conviene o te convenía, igual se les acabó la felicidad, "Happy" tu gato, se murió al salir, no fue mi caucho, lo juro, fue mi ebriedad, sabes que ligar no se me cae bien y tu papá quería con whisky por la consumación nuestra o por el coño e su madre que había venido a casa, no sé, no recuerdo.

Cuando pedí tu mano, en serio, debí cortártela antes de que te fueras. Era enrrollarme la lengua, matar tres tigres, vender Xbox, guitarra y televisor para pagar la cena, porque según tú ya nos habíamos "enseriado", yo pensé que andabas embarazada así que me cagué, vendí toda cosa que tenía a la vista, para estar prevenidos. Cuando no agarré la seña, pues pensé en proponerte matrimonio. Te invité a cenar en el restaurant en el que hasta la propina me pareció cara, te veías linda, ese día, me reprochaste si solo ese día y la noche comenzó mal; fuiste, pensabas que me habían ascendido, pero, ¿qué tanto se puede ascender en una librería en la que el dueño tiene 8 hijos? te dije, peleamos de nuevo. Me arrodillé a tu lado, tu te sonrojaste y sonreíste mirando a todos lados, "¿que clase de acto estás haciendo? vámonos, si quieres sin pagar la cuenta, ya estás ebrio" Cuando viste que de mí bolsillo saqué una cajita, un anillo con un diamente incrustado, lloraste, dijiste "sí, acepto" con cara de chivo al matadero, "coño, aceptó" todos aplaudieron, "Acepto irme de aquí y te fuiste". Lloré yo. Volviste "porque el anillo te parecía bonito" nada más.

Ese día, andabas hermosa también, me devolviste el anillo, las cosas se vinieron abajo, ninguna casa de cambio lo quería, ni tú tampoco, no estabas dispuesta a pasar tu vida conmigo, solo los días necesarios, hasta que se nos acabara el amor, coño, sinceramente yo tampoco quería casarme contigo solo pensé que estabas embarazada, me hubiera gastado todo lo que gasté en condones y pastillas anticonceptivas; las cosas empezaron a forzarse y me llevaste a almorzar al mismo lugar donde debí cortarte la mano, decidiste terminar conmigo, no rompiste mi corazón, rompiste mi cuenta bancaria, ¿por qué tuve que pagar yo? invitaste a almorzar tú.

Meses después, llamaste para restregarme en la cara tu "nueva adquisición", un sueco maravilloso que tenía su propio negocio, eras feliz con él. La otra vez te ví con un tipo de lejos, quizás entendí mal pero este era un chueco maravilloso, no tenía de europeo ni los zapatos, su negocio habrás sido tú y está en bancarota porque estás con unos cauchitos casi no te reconocí.

Al fin de cuentas me ascendieron, conocí a una linda colombiana, ella tiene siete hermanos y su padre tenía una librería, -el destino- ahora aparte de librero soy gerente de la casa donde vivimos, soy un chulo con honores. No amaré nunca a alguien como tú amada D. me dejaste un gran frío y sin alegría, te llevaste mis boxers de caritas felices.

Algún día estuve enamorado, lo descubrí ayer. ¿por qué nos separamos?

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